Qué hacer > Patrimonio Cultural > Valle Salado de Añana
Antigua villa romana y uno de los paisajes más singulares de tu viaje por Euskadi – Basque Country. ¿Por qué? Porque nada te prepara para ver un barranco excavado por manos humanas y cubierto por un complejo sistema de terrazas y canales de madera con un único fin: conseguir ese mineral comestible que durante siglos fue considerado ‘oro blanco’, la sal.
Las salinas de Añana –que dan el nombre de ‘valle salado’ al lugar– hunden sus raíces 6000 años atrás en el tiempo y, prácticamente, han estado funcionando sin interrupción hasta nuestros días.
En 2019, las salinas de Añana fueron reconocidas como Anchor Point por la Red Europea de Patrimonio Industrial (ERIH). Este reconocimiento es la distinción más relevante en materia de patrimonio turístico industrial, y se otorga a aquellos recursos que destacan por su importancia histórica, cultural y técnica.
Es el momento de apreciar la magia de una explotación que llegó a tener más de diez hectáreas (diez campos de fútbol) de superficie. La razón por la que emergen de la montaña manantiales de agua salada no tiene nada de mágico (se filtra a través de un sedimento), pero lo que realmente te asombrará son los esfuerzos del ser humano para extraer la mayor cantidad de sal de esa salmuera. Dedica un rato largo a Añana y súmate a alguna de las interesantes visitas guiadas y catas.
Las salinas de Añana son un lugar único que merece la pena visitar. Es un lugar donde podrás aprender sobre la historia, la cultura y la tradición de la sal de nuestra región.
Las salinas de Añana te ofrecen una experiencia única. Podrás recorrer el valle de las salinas, conocer los diferentes procesos de producción de la sal y aprender sobre la historia de este lugar. La visita a las salinas se realiza en grupos guiados, y dura aproximadamente una hora.
Durante tu visita podrás ver las eras de evaporación, las salinas de manantial y las balsas de cristalización. También conocerás la historia de las salinas a través de un audiovisual y de una visita a la Casa de la Sal.
En tu visita a las Salinas de Añana no te pierdas las Catas de sal, donde aprenderás sobre la tradición de la sal a través de una cata. En estas catas, aprenderás a distinguir los diferentes tipos de sal que se producen en las salinas, y a apreciar sus diferentes sabores y aromas. Las catas de sal se realizan en pequeños grupos, y duran aproximadamente una hora.